En Chile, la participación activa relativa de las personas mayores en el mercado laboral alcanzaba a un 11,4% el 2017, indicador que va en aumento. Chile, se ubica como el octavo país en cuanto a tasa de crecimiento de las personas mayores en el mercado laboral, después de países como Singapur y Holanda. Así, parece ser que cada día son más las personas mayores que optan por retrasar su retiro del mercado laboral, lo que se acentúa con el tiempo, pero ¿sabemos si las empresas están preparadas para abordar los desafíos que la mayor longevidad implica?
SeniorLab UC, a través del proyecto “Empresas con Experiencia”, busca generar un modelo que acompañe el cambio de mirada en torno a las personas mayores como fuerza laboral, que les permita adquirir buenas prácticas, mejorar las condiciones de empleo y generar más y mejores oportunidades de trabajo. Para ello, se han generado vínculos con empresas privadas de la Región Metropolitana, las que son parte activa de la co-construcción del modelo de acompañamiento y nos han brindado datos que son relevantes para comprender la situación actual en cuanto a su visión respecto de los procesos de vejez y envejecimiento en el mercado laboral.
En relación a las prácticas más comunes, dentro de las empresas, un 81% declara permitir que sus trabajadores/as continúen trabajando una vez que se han pensionado, siendo esta la única medida considerada por más de un 50% de las empresas. Otro elemento relevante, es que el 31% de las empresas educa respecto del sistema de pensiones, no obstante, solo un 13% informa e instruye respecto de los desafíos sociales y emocionales asociados al retiro del mercado laboral.
Asimismo, al indagar en la visión de personas mayores trabajando en empresas, se encuentra que tienen deseos de extender su vida laboral no necesariamente de manera formal, trabajando en emprendimientos familiares o generando un emprendimiento propio. En consecuencia, existe motivación por parte de las personas mayores por mantenerse activas, y económicamente productivas. No obstante, al considerar la carencia de acciones por parte de las empresas, la decisión de extender la vida laboral parece no depender exclusivamente de ellas.
Es relevante eliminar estereotipos negativos respecto del trabajo realizado por personas mayores; también es importante replantearse aquellos prejuicios positivos, distinguiendo por qué estos son aplicables en función de la edad. La experiencia internacional nos muestra que es el trabajo intergeneracional el que permite rescatar las mejores cualidades de las personas, valorando las diversas especialidades y experiencias de los trabajadores/as. Así, a lo que debemos apuntar es a generar, en conjunto, empresas que valoren la intergeneracionalidad, perfilándose como “Empresas con Experiencia”: aquellas que valoran la experiencia de las personas mayores y poseen una cultura organizacional diversa que promueve la intergeneracionalidad.
SeniorLab UC
Laboratorio de innovación en temas de vejez y envejecimiento.